Aquí hallarás un lazo hacia una página que habla de una enfermedad (generalmente) mortal y ocasionada por los medicamentos : el síndrome de stevens johnson y el síndrome de lyell http://www.avimedi.net/es.

Dios te salve José, lleno eres de gracia divina, bendito eres entre todos los hombres y bendito es el fruto de tu esposa virginal, Jesús. San José, dado como padre al Hijo de Dios. Ruega por nosotros y por nuestras preocupaciones de familia, de salud y de trabajo. Y socórrenos en la hora de nuestra muerte. Así sea.

Acuérdate, oh castísimo esposo de la Virgen María y amable protector mío, San José, que nunca se ha oído decir que alguien haya invocado tu protección e implorado tu ayuda sin tu auxilio recibir. Puesta mi confianza en tí, vengo a tí y me encomiendo a tí con todo el fervor de mi corazón. No desoigas mis súplicas, oh tú que eres llamado el padre del Redentor, antes bien acógelas con bondad. Así sea.

Glorioso San José, esposo de María, concedednos, os lo rogamos por el Sagrado Corazón de Jesucristo, vuestra protección paterna; Vos cuyo poder infinito se extiende a todas nuestras necesidades y sabeis hacer posibles las cosas más imposibles, abrid vuestros ojos de Padre a los intereses de vuestros hijos. En los trastornos y las penas que nos agobian, nos dirigimos a Vos con confianza. Dignaos tomar bajo vuestra protección caritativa este asunto tan importante y difícil, causa de nuestras inquietudes; que su feliz solución proclame la gloria de Dios y sea para el bien de sus devotos servidores. Amén.